¿Qué tal, Moneytimer?
Hoy vamos a hablar sobre la libertad financiera.
Seguro que has oído hablar de esta idea alguna vez. Pero, por si acaso, primero vamos a aclarar algunos conceptos.
Como explica muy bien en su post la hormiga capitalista, uno alcanza la libertad financiera cuando ya no depende de ingresos externos para mantener su nivel de vida, porque sus ingresos “pasivos” son suficientes para costear sus gastos.
¿Y cuál es la consecuencia más obvia de esto?
Pues eso que se ha convertido en el sueño dorado de algunas personas que persiguen la libertad financiera: No necesitar un trabajo (o más bien no necesitar los ingresos de un trabajo) para vivir.
¿Qué son esos ingresos pasivos de los que habla la libertad financiera?
Los ingresos pasivos a los que hace referencia el concepto de libertad financiera son aquellos que se obtienen sin necesidad de que estés dedicándoles tu tiempo.
Aquí te dejo algunos ejemplos:
- Los dividendos que recibes de tus inversiones
- Los intereses que cobras por la deuda de la que eres tenedor (acreedor)
- El alquiler que cobras por un bien que posees y que alquilas a terceros (una vivienda, un garaje, un traje de Freddy Mercury, etcétera, etcétera).
Los máximos exponentes y defensores del movimiento de libertad financiera suelen decir que nuestro objetivo debe ser llegar a generar suficientes ingresos pasivos para que no tengamos que trabajar. Que la vida se disfruta más si nos dedicamos a tomar mojitos en una playa paradisíaca o nos dedicamos a viajar por el mundo sin descanso.
Esta forma de ver la libertad financiera implica creer que a la mayoría de la gente no le gusta su trabajo y que no lo haría si ese trabajo no estuviese remunerado. Cosa que, probablemente, no va del todo desencaminada.
Pero… ¿es éste el enfoque adecuado para maximizar nuestra felicidad?
La libertad financiera no es la solución
Vale, digamos que los defensores de la escuela tradicional de libertad financiera tienen razón y la mayoría de la gente está descontenta con el trabajo que hace.
Ahora bien, ¿es dejar de trabajar la solución a este problema?
Lo dudo.
¿No parece mejor solución conseguir que cada vez más personas hagan un trabajo con el que se sientan realizadas?
Eso me suena bastante mejor.
Ya sé lo que estás pensando: ¡Pero no todo el mundo puede trabajar en lo que le gusta!
Quizá no.
Pero de una cosa estoy seguro: Para la gran mayoría de nosotros, es mucho más sencillo hacer un trabajo que nos guste, que alcanzar la libertad financiera con un trabajo que no nos gusta.
Y es que alcanzar la libertad financiera suele llevar su tiempo. Y si no estás contento con lo que haces, ese tiempo se te va a hacer muy muy pesado mientras intentas alcanzar tu objetivo.
Los estudios lo avalan
No creerás que hablo por hablar, ¿no?
Hay numerosos estudios que avalan estas ideas que te acabo de soltar tan alegremente. Algunos de estos estudios aparecen en este post: El problema de la jubilación tiene solución.
Y aquí tienes un artículo que expone cómo nuestra felicidad, e incluso nuestra salud, están fundamentadas en aspectos psicológicos de lo que motiva al ser humano a realizar acciones (como la de trabajar). Está en inglés pero te lo dejo aquí copiado en google translate para que lo puedas leer en español si quieres.
En otras palabras, tenemos más probabilidades de alcanzar la felicidad y prolongar nuestra salud manteniéndonos activos y dedicando parte de nuestro tiempo a trabajar en algo que nos gusta y nos inspira.
Tener un fondo de emergencia o suficientes ingresos pasivos para poder afrontar con serenidad situaciones adversas es algo maravilloso. Pero «protegernos de situaciones adversas» es un objetivo, y “hacer lo que nos de la real gana todo el tiempo” es otro muy distinto.
«Hacer lo que nos da la gana todo el tiempo» suena muy tentador y quizás algunas personas serían completamente felices viviendo 40 años de esta manera. Pero según la ciencia, para la gran mayoría de nosotros no sería así.
Por eso la libertad financiera no es suficiente. No es un buen objetivo en sí mismo, porque hay algo que falta. Algo profundamente enraizado en nuestra naturaleza humana.
Y aquí termina la primera parte del post de hoy. En la segunda parte te explicaré por qué adoptar otro tipo de filosofía es mucho más interesante desde el punto de vista vital.
Y si quieres seguir aprendiendo sobre cómo disfrutar de la vida hasta los 90, consulta nuestra sección #Estilodevida.
Moni 
