¿Invertir a largo plazo? No gracias (Parte 2)

Imagen: Daniel Brachlow

En la primera parte de este post hicimos una reflexión sobre esa recomendación genérica de las finanzas que se centra en la conveniencia de invertir a largo plazo y hablamos de la experiencia de inversión de Warren Buffett, quien acumuló la inmensa mayoría de su fortuna gracias al poder del tiempo y el interés compuesto. En esta segunda parte vamos a centrarnos en las implicaciones prácticas de este principio para ti.

Y vamos a empezar con otra historia que ilustra el poder de la visión de largo plazo, y que probablemente te suene.

Amazon se ha convertido en un gigante del comercio electrónico, con el que otras empresas apenas pueden competir. Sin embargo, esto no sucedió de la noche a la mañana. Llevó mucho tiempo y muchas decisiones que implicaban sacrificios y pérdidas a corto plazo en aras de conseguir una mejor posición a largo plazo.

En su carta a los accionistas de 1997, titulada «It´s all about the long term» («Todo va sobre el largo plazo»), Jeff Bezos, el fundador de Amazon, dijo una serie de cosas que sorprendieron a muchos, porque iban en contra del mantra del momento sobre los beneficios a corto plazo y de conseguir que el precio de las acciones de la empresa subiera lo más rápido posible.

Básicamente, Bezos dice algo así: «Los que quieran beneficios a corto plazo, están en la empresa equivocada. Vamos a hacer muchas cosas que van a destruir valor para la empresa a corto plazo con el objetivo de satisfacer al cliente lo máximo posible, porque creemos que eso es lo que nos llevará donde queremos ir. Vamos a liderar el mercado y ser rentables, pero todo eso llegará dentro de mucho tiempo».

Booom.

largo plazo
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Poco más que una herejía para el mundo financiero de entonces.

Pero así lo hicieron. Año tras año, a la hora de enviar su carta a los accionistas, Bezos adjuntaba la carta de 1997 para que nadie se olvidara de que la estrategia no estaba centrada en el corto plazo, sino en el largo.

El resto ya lo sabes. No sólo lo consiguieron. Lo consiguieron a lo grande. Pero les llevó mucho, mucho tiempo.

Tal es el poder de la visión de largo plazo. Una visión que generalmente requiere sacrificar y renunciar en el corto plazo para obtener grandes beneficios en el tiempo.

Pasemos ahora a reflexionar un poco sobre lo que implica todo esto para ti en la práctica.

Las implicaciones prácticas de la visión de largo plazo en la inversión

La perspectiva de Warren Buffett y Jeff Bezos suscita una cuestión interesante:

Muchas personas persiguen altas rentabilidades. Pero ¿será eso tan importante como parece?

¿O será más importante diseñar una estrategia de inversión que nos permita sentirnos suficientemente cómodos como para dejar que el tiempo haga su trabajo?

Imagen de Jill Wellington

El problema fundamental de la estrategia de altas rentabilidades es que no favorece la acumulación de riqueza en el tiempo a través de la reinversión continuada. Son inversiones de alto riesgo que provocan fuertes alteraciones en nuestras emociones y como consecuencia nos llevan a tomar muchas decisiones a corto plazo, en lugar de relajarnos y dejar que el tiempo pase para que la estrategia dé sus frutos.

¿Y qué pasa cuando tomamos muchas decisiones de corto plazo?

Exacto. Nos equivocamos más. Y esas equivocaciones pueden salir muy caras.

Por todas estas razones, es muy posible que tu mejor movimiento sea identificar una estrategia de inversión con la que te sientas cómodo a largo plazo. Con toda probabilidad, ésa será una estrategia de menor riesgo que las alternativas de altas rentabilidades. Y por tanto, ofrecerá también una rentabilidad esperada más baja.

¿Es eso un problema?

Depende.

Si tienes tiempo por delante y lo que quieres es generar riqueza a largo plazo para vivir como quieres vivir con el menor riesgo posible, no es ningún problema. Todo lo contrario. Es la estrategia adecuada.

Si no tienes tiempo y quieres generar riqueza a corto plazo, probablemente esta estrategia te suene excesivamente conservadora. Sólo debes recordar que el riesgo de las estrategias que prometen la luna suele ser mucho más elevado de lo que parece, y que es muy posible que tus emociones te empujen a tomar decisiones que no te favorecen demasiado.

Tú decides qué camino quieres tomar, Moneytimer. Aunque seguro que intuyes cuál de los dos me convence más para el grueso de tus ahorros.

Aquí termina el post. Un post muy importante para tu salud financiera.

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