¿Cómo funciona un seguro de hogar?

Imagen: Tumisu

Si ya no vives con tus padres, seguramente te habrás visto en la tesitura de contratar un seguro de hogar (también llamado seguro de vivienda), seas propietario de tu vivienda o inquilino en un contrato de alquiler. Y si no es el caso, todo llegará. Así que vamos a tratar algunas cosas que nos conviene saber a la hora de lidiar con este asunto.

Como sabes, los seguros son contratos entre un asegurador y un asegurado. El asegurador se obliga a pagar al asegurado, a cambio de una prima, una cantidad determinada en caso de que se produzca un riesgo o un acontecimiento incierto. En el caso que nos ocupa, un acontecimiento relacionado con la vivienda.

seguro de hogar

Se estima que alrededor de un 75% de las viviendas españolas tienen contratado un seguro de hogar, a pesar de no ser obligatorio. La excepción es la existencia de una hipoteca, puesto que al existir esta, la entidad bancaria suele exigir al propietario un seguro de hogar capaz de proteger, como mínimo, la estructura de la vivienda.

¿Y por qué tanta gente contrata seguros de hogar?

Sencillamente, porque en una casa, al cabo del tiempo, suceden un montón de acontecimientos imprevistos. Y algunos de ellos son farragosos e inconvenientes para nuestro bienestar, además de representar un gasto de reparación importante.

Veamos algunos de los daños más comunes.

Imprevistos más habituales en el hogar

Goteras y cristales rotos

Los daños causados por el agua son los accidentes domésticos más comunes. Según los datos de las plataformas públicas que consolidan la información de las entidades aseguradoras, alrededor de un 41% de los incidentes que se producen en el hogar corresponden a este tipo de daños.

La rotura de cristales es otro de los problemas más comunes. En España se rompen 1,2 millones de cristales al año, sólo contando los sucesos reportados a las aseguradoras.

Daños provocados por terceras personas

Imagina que estás tranquilamente en tu habitación leyendo un libro y empieza a entrar agua por debajo de la puerta. Inmediatamente piensas que es cosa de tus hijos, pero te equivocas: Es porque tu baño se ha inundado por el agua que se filtra a través del techo. Tu vecino de arriba se ha dejado el grifo abierto.

En este caso, si tienes un seguro de hogar con las coberturas adecuadas, no tendrás problema. Tu aseguradora evaluará los daños y se pondrá en contacto con la aseguradora de tu descuidado vecino, si la tiene, para organizar la compensación adecuada.

Robo de bienes materiales

Los robos son un acontecimiento muy frecuente, especialmente en los últimos años. Además de la sensación de inseguridad, si tienes bienes de valor en casa como joyas, objetos de arte o aparatos electrónicos y te los roban, es un palo.

Sin embargo, si cuentas con un seguro de hogar, estarás protegido contra la pérdida material, porque lo habitual es que en caso de sustracción, te devuelvan el valor de lo que te han robado. Además, gran parte de los seguros también cubren los robos o atracos que los asegurados y las personas que viven en el domicilio asegurado sufran fuera de casa.

Incendios

Según los datos obtenidos por el ‘Estudio de Víctimas de Incendio en España: 2010-2019’, realizado por la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB), en España, se produjeron 54 incendios en viviendas al día en 2019. Durante el año 2019 hubo un total de 129.544 incendios en España, un 9% más que el año anterior. De ellos, concretamente 19.661 tuvieron lugar en viviendas.

Los incendios en domicilios, bien sea a causa de fallos eléctricos, fuga de gases, combustibles como el butano, o vinculados a artefactos de calefacción en mal estado, son más comunes de lo que parece y pueden representar pérdidas materiales muy graves. Por eso, una de las coberturas principales del seguro de hogar son los daños por incendio.

ICEA estima que, por ejemplo, el importe medio por siniestro en caso de incendio supera los 2.500 euros. En caso de no disponer de un seguro de hogar, ése sería el precio medio que los propietarios de viviendas deberían abonar de forma íntegra en caso de sufrir un incendio.

Tipos de seguros de hogar

1. Seguro de daños de la vivienda

Este seguro cubre la estructura de la vivienda, lo que se conoce como “continente” en las pólizas de seguros. Según el valor asignado al inicio de la vigencia de la póliza, en caso de la pérdida total de la vivienda, la compañía aseguradora abonará al asegurado dicho importe.

En caso de que la vivienda tenga alguna carga hipotecaria, la aseguradora liquidará primero esa deuda y entregará la cantidad sobrante al asegurado. Es muy importante valorar bien el continente, ya que algunas compañías pueden proponerte bajar su valor para disminuir el precio de la prima anual. Pero esto supone un riesgo, ya que en el caso de siniestro y pérdida de la vivienda sólo se te entregará lo valorado previamente.

2. Seguro multirriesgo

Esta modalidad de seguro protege los objetos que contiene tu vivienda, los accidentes o siniestros que se puedan producir en ella, así como los daños que tú puedas causar a otros, lo que se conoce como Responsabilidad Civil a terceros. Las coberturas más comunes son:

  • Incendio, explosión y daños por humo
  • Robo
  • Daños por agua
  • Daños eléctricos
  • Rotura de cristales y placas
  • Defensa jurídica y reclamaciones a terceros
  • Responsabilidad Civil a terceros

Aparte de estas coberturas, hay muchas otras. Aunque te guste protegerte contra imprevistos, ten cuidado con sobreasegurar. Valora bien el continente y el contenido y elige sólo las coberturas relacionadas con los acontecimientos que más te preocupan.

3. Seguro de amortización de préstamo

Este seguro te cubre las cuotas de la hipoteca en caso de defunción, invalidez absoluta e invalidez permanente. Algunas entidades bancarias exigen contratarlo al inicio del préstamo hipotecario. 

Ahí tienes las principales cosas a tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de hogar. ¡Dale bola, Moneytimer!

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